1964-1970 Gustavo Díaz Ordaz

Política interna:
Al comenzar el periodo presidencial de Gustavo Díaz Ordaz persistía la situación de equilibrio y crecimiento económico, derivada de la política estabilizadora implantada por los gobiernos anteriores y, como era de esperarse, se comprometió a continuar con aquel modelo de desarrollo y a proseguir con las medidas que se habían considerado adecuadas: fomento al sector industrial y mantenimiento de la política de estabilidad.
Para llevar a cabo tales medidas se sirvió de los siguientes mecanismos, que aunque ya habían sido utilizados por sus antecesores, adquirieron mayor importancia durante su gobierno: 1) una adecuada política fiscal y crediticia; 2) creación de empresas paraestatales y procuración de obras de infraestructura; 3) expansión del sistema de prestaciones para la clase trabajadora; 4) relegación del sector primario de la economía; 5) utilización de mecanismos de control político de la clase obrera.
Política externa: El gobierno de Díaz Ordaz se circunscribió principalmente al ámbito del continente americano; buscó imprimir un mayor dinamismo a las exportaciones mexicanas, para lo cual se hicieron algunos viajes a Centroamérica, región a la que se consideraba favorable para el comercio mexicano. Fiel a la política exterior de México, Díaz Ordaz se fundó en el principio de no intervención y participó en algunos acuerdos relacionados con los beneficios a países en desarrollo. Uno de los más importantes fue el Tratado de Tlatelolco.
Las relaciones con estados unidos siguieron ocupando un lugar prioritario en lo económico y en lo político. El modelo de desarrollo estabilizador continuaba ligado a las inversiones estadounidenses y en cuanto a lo político, las relaciones con EU de desarrollaron básicamente en un plano liberal, con excepción de algunos problemas y discrepancias.
Entre los acuerdos bilaterales destacan los siguientes:
·         En enero de 1965 ambos gobiernos diseñaron un plan concreto para reducir la salinidad de las aguas del Río Colorado.
·         En octubre de 1967 se reintegraron físicamente al territorio mexicano las 176.92 hectáreas que constituían El Chamizal.
·         El enero de 1968 se firmó un acuerdo que por cinco años otorgaba derechos recíprocos de pesca en embarcaciones de los dos países.
·         En abril de 1970, Díaz Ordaz y Richard Nixon, presidente de EU, dieron a conocer un acuerdo mediante el cual se buscaba resolver los problemas fronterizos originados por los cambios de cauce del Río Bravo.
Las relaciones entre México y Estados Unidos fueron de mutua condescendencia en otros aspectos. Los estadounidenses no parecieron preocuparse por prestar atención a los esfuerzos del gobierno mexicano para obligar a las compañías subsidiarias de empresas extranjeras a que aceptaran la participación de capital mexicano.
Respecto a las discrepancias entre México y EU, estas se enmarcaban en la tradicional lucha ideológica a causa del intervensionismo y del imperialismo estadounidense.
Entre los problemas concretos destaca el que ocasionó la llamada “operación intercepción” cuyo objetivo era “disminuir el flujo de contrabando de drogas procedentes de México”, pero el verdadero motivo era entorpecer el paso de visitantes estadounidenses a las ciudades fronterizas mexicanas, con el fin de ejercer presión sobre México y mostrar ante la opinión pública de EU la labor de su gobierno para acabar con el tráfico de estupefacientes.
El hecho mas importante en el sexenio es el 2 de octubre de 1968 conocido como "La matanza de Tlaltelolco " en donde se da la balacera a estudiantes en la plaza de las 3 culturas.